viernes, 2 de octubre de 2020

Aluvión

 El paisaje no es el mismo...

Con mis ojos víctimas de la apatía

todo se torno blanco y negro 


como el letargo que me consumía,


que me lleva a peregrinar 


la habitación del olvido


donde no logro generar respuesta.



No se eriza tu marmol desnudo


no se humedece aquella hierba,


sientes olvidar aquel diluvio


cuando todo lo hacíamos juntos.


Aquellos encierros donde el diluvio

 

fuiste tú y me escondía 


bajo el pecado de tu lengua


y esa perversa mirada trascendía.



Era de los placeres víctima del aluvión 


ese que me ahogaba y me perdía 


que venía de ti, de tu paisaje 


sobre mi tumbada y jadeante


iluminada,


como los faros en la madrugada


al separarnos,


mirándonos sin ganas de irnos 


y en algún rincón  


 la calle nos escondía


e inesperadamente me embriagabas,


donde inesperadamente te hice mía.



©️H. LÓPEZ G.